Glob@l México.- El gobierno federal "de ninguna manera" dejó crecer a las autodefensas de Michoacán, dijo el presidente Enrique Peña Nieto este miércoles, durante una escala en su viaje al Foro Económico Mundial de Davos.
"Al contrario, creo que el espacio que nos ha permitido este año de actuación, como las cifras y la estadística claramente lo acreditan, es claro que hay una disminución real, realmente, de los niveles de violencia", dijo Peña en el Aeropuerto Internacional de Gander, en Canadá, de acuerdo con un reporte de la agencia estatal de noticias, Notimex.
El mandatario dijo a reporteros que la respuesta del gobierno ha sido "puntual y firme" para hacerse cargo de la seguridad en la zona de Tierra Caliente, donde desde febrero de 2013 se han extendido las autodefensas, en el sur de Michoacán.
"Estamos haciendo frente en una estrategia que no solo está en combatir la inseguridad, ni combatir al crimen organizado", dijo Peña. "También en otras acciones orientadas a la reconstrucción del tejido social y sobre todo a lograr un desarrollo integral en ese sentido".
"Da la impresión de que el gobierno ha ido aprendiendo en el camino, improvisando sus posiciones frente a un hecho que es de la mayor gravedad", dijo en una conferencia de prensa el director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, según un reporte de la agencia EFE.
En noviembre de 2013, tanto el gobernador de Michoacán, Fausto Vallejo, como el procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, dijeron que no permitirian que las autodefensas se extendieran por el estado, pero estos grupos conformados por civiles armados se encuentran en al menos 20 municipios de Tierra Caliente, según la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
El Estado, único responsable: Peña
"El gobierno con toda claridad y con toda precisión ha afirmado que es el Estado mexicano el único responsable de mantener las condiciones de seguridad", dijo Peña durante su viaje a Davos.
La semana pasada, tras el avance de las autodefensas alrededor del municipio de Apatzingán, un supuesto bastión de Los Caballeros Templarios, la administración federal firmó un acuerdo con el estado e implementó medidas como el envío de policías y soldados, y la creación de una comisión especial para la seguridad en Michoacán, a cargo del extitular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Alfredo Castillo.
Analistas, legisladores y dirigentes de partidos opositores han criticado las facultades otorgadas a Castillo, pero César Camacho, líder del Partido Revolucionario Institucional, al cual pertenece el presidente, dijo que el nuevo funcionario "no sustituye" al gobernador Fausto Vallejo.
Vivanco, de HRW, consideró que la intervención federal "se justifica" cuando las policías locales han tenido influencia del crimen organizado o violan los derechos humanos.
Esta es la segunda vez que Peña Nieto habla sobre el conflicto en Michoacán desde que la violencia se intensificó el 10 de enero, con varios incidentes violentos en Apatzingán. La primera vez fue para anunciar una estrategia cultural que incluye al estado "para la reconstrucción del tejido social".
La "disminución sensible" de la violencia
Peña Nieto consideró que 2011, aún durante la administración de Felipe Calderón, fue el año más crítico en términos de la violencia en el país "y que a partir de ahí y especialmente en el último año se ha registrado una disminución sensible en los niveles de violencia".
Durante el gobierno de Calderón (2006-2012), la violencia ocasionó la desaparición de 26,121 personas y la muerte de al menos 70,000, según datos de la Secretaría de Gobernación.
Pese a la presencia de las fuerzas federales desde la semana pasada en Michoacán, se han registrado varios hechos violentos, como un enfrentamiento entre soldados y autodefensas durante el operativo de desarme, el incendio de una farmacia en Apatzingán, el hallazgo de cinco cadáveres y un tiroteo que según autodefensas fue un enfrentamiento entre ellos y miembros del crimen organizado.