México, D.F.- Independientemente de los calificativos que sus acciones pudieran recibir, si se trata de tráfico de influencias o no, o si estamos o no, ante el caso de tener a la constructora del sexenio, el caso Higa se le está complicando al Gobierno Federal y a sus funcionarios más cercanos, consideró la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Beatriz Zavala Peniche.

"Los priistas no han sabido entender que el México de hoy no es el mismo país que dejaron en el año 2000. Hoy, los ciudadanos exigen, vigilan y opinan libremente, y sobre cualquier lectura que pudieran darle en Los Pinos, la gente no se va a creer el primer cuento que les hagan", agregó la legisladora yucateca.

Esta situación, declaró a Notimex, está conllevando a un riesgo enorme de pérdida de credibilidad y es necesario asumir posturas serias y creíbles en vez de apostarle a las vacaciones de diciembre para que las cosas se tranquilicen y se olviden por el solo hecho de transcurrir el tiempo.

Entrevistada sobre un balance del año que está a punto de concluir y el término del período de sesiones, la legisladora dijo que de nada servirán las reformas legislativas aprobadas y las que se puedan aprobar más adelante, ni los nuevos marcos legales que se le han dado sin regateos al Presidente, si las instituciones continúan perdiendo credibilidad ante la población.

"Está claro que medidas trascendentales como el haber desindexado el salario mínimo a todas las multas, sanciones y cuotas que cobran las instituciones servirán de poco o de nada si en la próxima fijación de los salarios para 2015 se vuelven a aumentar algunos centavos y se continúan empleando los mismos indicadores de años anteriores", dijo. "Hoy vivimos una acelerada pérdida del poder adquisitivo que se refleja en la inflación, en las condiciones actuales de la devaluación del peso frente al dólar, entre otras".

"Están ocurriendo muchísimas cosas que tienen a la población muy pendiente de lo que sucede en el país", agregó. "La correcta lectura del entorno y la decisión de medidas adecuadas para enfrentar lo que está pasando deben ser congruentes, sin decálogos que simplemente no llenan las expectativas y con autoridades que actúen en vez de escudarse en interpretaciones legales para dejar de intervenir en temas como el caso de la casa blanca en Las Lomas, y ahora con la casa del Secretario de Hacienda".

"Urgen no solo el respeto de la ley sino también recuperar el reconocimiento y la integridad de la institución presidencial", acotó, "porque en esta acelerada caída de imagen estamos perdiendo todos, y eso es grave".

Añadió que la gente reclama posiciones claras y creíbles y no es posible apostarle a que el tiempo lo borre todo, ni a justificarse en que los temas que hoy se discuten son producto de una campaña de desprestigio.

"Se trata de casos ubicados, identificados y que requieren ser tratados con pulcritud", dijo. "No resulte después que, como suele ocurrir muy comúnmente en el dicho popular, que la muchacha ultrajada acabe resultando culpable porque no se viste adecuadamente".

"Preocupa mucho la situación actual del país y preocupa más que las situaciones no sean asumidas con responsabilidad. Ya es momento de actuar como es debido y no como mejor convenga al rating. Este también se gana haciendo las cosas de la manera correcta", concluyó.

 

*Vía: Agencias/Sipse