Patricia Flores

SANTIAGO MIAHUATLÁN. Retienen habitantes de Santiago Miahuatlán un autobús en el que el alcalde, Luis Flores Rodríguez, trasladó a personas para que acudieran a su toma de protesta, a la cual el funcionario arribó en medio de huevazos y pedradas de parte del grupo opositor a su administración.

Es de recordar que desde la noche del miércoles el Palacio Municipal de ese lugar permaneció bloqueado por parte de pobladores que aseguraron hubo fraude electoral, además de que la administración saliente vendió tanto las unidades oficiales, como mobiliario propiedad del Ayuntamiento.

El conflicto reventó ayer debido a que el hoy alcalde decidió que haría su toma de protesta, en una calle frente a la explanada municipal, lo que provocó molestias en los manifestantes, quienes se sintieron burlados por esta situación; ante este panorama desde temprana hora se reunieron alrededor de 200 personas, quienes aseguraron que ya estaban en dialogo con las autoridades estatales, el acuerdo fue que ellos ocuparían el Palacio Municipal y el presidente y sus seguidores la otra calle.

Fue alrededor de las 11:20 de la mañana cuando un par de policías ingresó a la comandancia, por lo que quitaron de en medio a los inconformes, quienes enseguida reaccionaron, pues esa acción de parte de la Policía Municipal se tomó como una provocación, gritos, jaloneos y empujones, no se hicieron esperar, por lo que los dos elementos se resguardaron en la comandancia.

El resto de sus compañeros corrieron a auxiliarlos, de modo que los manifestantes los encararon, ante esa reacción los elementos dela Policía Municipal se retiraron, aunque el ánimo se calmó por varios minutos, fue alrededor de las 12:00 horas cuando se volvieron a caldear, pues al lugar donde se realizaría la toma de protesta llegó, Flores Rodríguez.

Aunque iba rodeado de elementos municipales y varias mujeres, esto fue insuficiente para la lluvia de piedras y huevos que le cayeron encima, así como a su comitiva, quienes corrieron a guarecerse bajo la lona que se había puesto para la ocasión, a pesar de que el sonido era potente, durante todo el evento se escuchó de fondo el grito de los manifestantes, quienes de prodigaban calificativos a sus nuevas autoridades.

El acto duró apenas una hora, en la cual se pudo notar varias sillas vacías, pues a decir de sus detractores las personas que lo acompañaron venían en varios autobuses provenientes de la sierra y de las distintas inspectorías; tras el evento se procedió a una comida ofrecida por el nuevo alcalde.

Pese a que se creyó que en ese momento ya no habría más agresiones, menos de una hora después fueron retenidos tres camiones en los que se “acarreó” gente, pero se liberaron dos, uno de ellos se llevó hasta la explanada municipal, donde amagaron con quemarlo en caso de que no se les dé una respuesta, la unidad esta rotulada como “Turísticos Romero”, placas 297-RK-8, del servicio público federal.

Hasta el cierre de la edición se esperaba al delegado de Gobernación Estatal para que entablara un nuevo dialogo con los quejosos, ya que además del camión aseguraron equipo de sonido del grupo que amenizaría la verbena popular, hasta el cierre de esta edición el funcionario no había llegado.