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La eterna lucha contra la vejez, se adelantó un paso. Ahora, un grupo de científicos de Australia y Estados Unidos descubrieron las causas del envejecimiento en ratones y lograron revertir el envejecimiento muscular en estos animales. Sin embargo, esto no para en un mero logro en roedores y también esperan poder realizar pruebas clínicas con seres humanos a finales del 2014.

Los investigadores de las universidades de Harvard y Nueva Gales del Sur piensan que este descubrimiento se trata del punto de partida para que este mismo proceso sea aplicable a los seres humanos. Ahora, el equipo liderado por David Sinclair desarrolló un compuesto que podría, eventualmente, lograr que una persona de la tercera edad se sienta como joven.

¿La clave?

Un compuesto denominado NAD, el cual el organismo fabrica de forma natural y va reduciéndose a medida que las personas envejecen. En el proceso de envejecimiento la comunicación en las células entre el núcleo y las mitocondrias se rompe. Sin embargo, estos investigadores logrado crear este compuesto endógeno para restaurarla.

De esta manera, los especialistas demostraron en ratones que suministrando este compuesto se logra revertir el envejecimiento al menos para tres indicadores básicos de una buena salud: resistencia a la insulina (una condición que eleva el riesgo de diabetes), inflamación (relacionada con cáncer y enfermedades cardiovasculares) y el desgaste muscular. Sin embargo el aspecto más extraordinario de este rejuvenecimiento logrado en el experimento es que, si es traslado a humanos, sería similar a rejuvenecer 40 años, según publicó la revista Cell.


De igual forma, los investigadores también analizaron en ratones ancianos enfermedades como la diabetes, la atrofia y debilitamiento muscular, así como inflamaciones que pueden ser el detonante de enfermedades como la artritis.

Por su parte, los ensayos en humanos podrían comenzar en un año, dio a conocer el profesor de genética, David Sinclair. “He estudiado el envejecimiento a nivel molecular por casi veinte años y nunca pensé que vería que el envejecimiento pudiera revertirse.

Pensaba que sería afortunado si lo desaceleraba un poco”, dijo. Esta es la primera ocasión en la que se describe el papel de este compuesto en el deterioro de la edad. Si estos resultados se repiten se podría acabar con la idea de que el envejecimiento es un proceso inevitable y sin vuelta atrás.

Debido, a que la teoría científica más asentada es que las enfermedades relacionadas con el paso del tiempo son el resultado de mutaciones en el ADN mitocondrial irreversibles.

El trabajo muestra un nueva ruta para luchar contra el envejecimiento que aún no se había explotado. El equipo dirigido por Sinclair descubrió que a medida que el ser humano cumple años se producen en su organismo una serie de acontecimientos moleculares que hacen más difícil la comunicación celular interna, entre el núcleo y las mitocondrias, las cuales cumplen la función de baterías energéticas de las células.

A medida que se rompe la comunicación, se acelera el envejecimiento. Sin embargo, un aporte extra de NAD consigue restaurar esa comunicación perdida y devolver el vigor a los tejidos de los ratones tratados.