El propietario de un molino asesinó de dos tiros en el pecho a un sujeto que pretendía asaltarlo apuntándole con una pistola, al forcejear con él delincuente el comerciante le quito el arma y le disparo quitándole la vida.
El asaltante quedo muerto en la vía publica, sentado sobre la banqueta recargado en la pared en la Colonia San Rafael Chamapa, municipio de Naucalpan. Después del incidente, el comerciante llamó a la policía consiente que había actuado en legítima defensa, por lo que los uniformados lo trasladaron al ministerio publico.
El nombre del comerciante no fue revelado por motivos de seguridad, quien menciono a las autoridades que trabajaba y se ganaba la vida honradamente como todos los días en su molino, cuando fue sorprendido por un sujeto que a punta de pistola y bajo amenazas de muerte intentaba asaltarlo.
Ante el temor de que el delincuente lo asesinara, señaló, sacó de la caja el poco dinero que había obtenido producto de la venta del día, pero cuando estaba a punto de entregárselo al ladrón, aprovechó una distracción de éste y se le abalanzó, comenzaron a forcejear y durante el mismo forcejeó afortunadamente logro quitarle la pistola.
Una vez que el delincuente tenía el dinero producto de la venta, intento golpear al comerciante, quien no tuvo más remedio que dispararle dos balazos con la misma pistola, quedando el asaltante sentado sobre la banqueta, recargado en una pared desangrándose.
Agregó el comerciante, que cuando reaccionó se percató que el presunto ladrón agonizaba, por lo que pidió la una ambulancia de la Cruz Roja, sin embargo, cuando los paramédicos llegaron y trataron de brindarle los primeros auxilios el baleado estaba muerto.
Ante tal testimonio, el molinero quedó a disposición del ministerio público, a fin de que sea esta instancia la que con base en sus actuaciones y declaraciones de testigos determine su situación jurídica, la cual se espera le sea favorable, toda vez que actuó en legítima defensa.