Instantánea muerte sufrió infortunado individuo, luego de que cayó estrepitosamente del puente del río Rosas, en esta ciudad, la noche de este martes.

Hasta el momento, se desconoce si el hoy occiso, quien se encuentra en calidad de desconocido, se arrojó del transitado paso a desnivel o cayó accidentalmente.

Lo cierto es que presentaba considerables heridas en el cráneo, las cuales fueron mortales.

Minutos antes de las nueve de la noche, personal del Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C-4) de Tula reportó, vía radio, a agentes policiales y socorristas que había un hombre en el fondo del desnivel.

Literalmente, cayó de unos diez metros de altura.

Policías municipales de Tula, al mando del comandante José Luis Rivera Martínez, fueron los primeros en llegar al referido sitio ubicado en la popular colonia La Malinche. Notaron que el infortunado individuo yacía en el fondo del citado arroyo.

Tras constatar que se trataba ya de un cadáver, los uniformados solicitaron la presencia de autoridades de la Procuraduría General de Justicia a fin de que dieran fe de los hechos.

Onésimo Flores Aparicio, agente del Ministerio Público, junto con su secretario Jesús Hernández Ángeles y el prestatario Emmanuel Juárez realizaron las diligencias de rigor en compañía de peritos en criminalística de campo y agentes de la Coordinación de Investigaciones, Grupo Tula, al mando del comandante César García Nuño.

En el fondo del citado puente, las autoridades ministeriales hallaron el cadáver de infortunado individuo, de unos 36 años, complexión media, 1.60 metros de estatura, cabello corto a rape, frente mediana, cejas pobladas, ojos cafés, nariz recta y pómulos regulares.

Vestía camisa azul, playera negra, zapatos del mismo color y pantalón de mezclilla negro..

Como seña particular, presenta varios tatuajes, entre ellos una lágrima en el pómulo izquierdo, la figura de la Santa Muerte en brazo izquierdo y la leyenda: "Perdóname, Madre Mía" en el pecho.

Cerca había una mochila negra de tela que contenía diversos objetos y una botella de plástico con líquido, al parecer pulque.

Tras efectuar la inspección correspondiente, los representantes sociales ordenaron el traslado del cuerpo sin vida al Servicio Médico Forense (Semefo) local, con objeto de que la médica legista Gabriela Borgonio Chávez practicara la necroscopia de ley.