Redaccion
Como parte de sus obligaciones y responsabilidades como servidores públicos, tal y como lo marca la ley, el hecho de rendir cuentas anualmente a la población de lo realizado al frente de sus gobiernos representa para los alcaldes un sinónimo de honestidad y capacidad para llevar las riendas de una administración, aunque, en algunos casos, esto significa motivo de preocupación y desgaste político con la ciudadanía.
El día de hoy corresponderá el turno al alcalde de Tepeapulco, Alberto Franco Ramírez, rendir públicamente su primer informe de gobierno luego de que sus homólogos de Tlanalapa, el panista Arturo Ramírez Damián y el priísta de Emiliano Zapata, Alejandro González Méndez, ya lo hicieran ante su comunidad.
Será en punto de las once de la mañana cuando el político del Revolucionario Institucional exponga ante la población, tal y como previamente lo hiciera por escrito ante la Asamblea Municipal de esa demarcación, los números, acciones y ejecuciones que en los principales rubros de su administración ha trabajado desde que asumió el mando a partir del 16 de enero pasado.
Para mañana, le tocará hacer lo propio al presidente municipal de Almoloya, de extracción perredista, Gerardo López Ramírez, comparecer ante su pueblo de lo realizado durante estos siete meses de trabajo al frente del Ayuntamiento.
En el caso de Apan, Fernando Hernández Durán sólo se limitará a presentar su concentrado de actividades por escrito ante el pleno de la Asamblea Municipal, el próximo 18 del presente mes.
Misma situación prevalece en el municipio de Epazoyucan, donde Carlos Santillán Muñoz aún no define el día que rendirá su informe de actividades, que lo más probable también sea por escrito ante los regidores.
Y en el caso de Selene Peña Ávila, alcaldesa de Zempoala, sigue sin ponerse de acuerdo con la Asamblea de ese municipio para la fecha en que dé a conocer, ya sea público o por escrito, su informe de labores, que posiblemente sea el próximo 20 de septiembre.