Por.- Calletano de Jesus.
La SCT no voltea a ver el sobrecupo en el tren suburbano en el Estado de México.
Es un transporte muy caro y cada día desde el inicio de operaciones la cantidad de usuarios va en aumento, no así el número de corridas que impidan el sobrecupo.
El gran negocio de la concesionaria es evidente, a costa del maltrato al usuario que viaja parado y como sardina en lata.
Ni los Gobiernos del estado de México y del Distrito Federal o la SCT regulan el cupo máximo para seguridad y comodidad del usuario, poniendo los limites correspondientes a la concesionaria del cupo y evitar que viole los derechos del usuario a u
n transporte digno, obvio que la empresa encargada de las operaciones espera a que se llene al maximo, lo hace con el único fin de obtener mayores ingresos en detrimento de la comodidad que debería tener el usuario no solo por derecho, si no tambien por el alto precio que paga por el viaje.