El presidente municipal Salvador Montoya Moya  juega con la prometida reforma en la administración, no obstante que fue una de sus promesas en campaña, sin embargo hasta el momento no ha llegado la hora en que la cumpla.

Rodeado de un exceso de personal que en la mayoría de los casos no reúnen el perfil requerido para desarrollar la actividad encomendada a favor de los gobernados, inmersos en el limbo del no quehacer, desgastan la imagen del partido que lo llevó al trono (PRI).

La excesiva plantilla laboral del municipio es una de las causas por las que no se cuenta con los recursos necesarios para mejorar la infraestructura de servicios en el poblado, toda vez, que en el pago de burócratas se gasta la mayor cantidad del presupuesto.

A falta de obra o gestión de la “buena” -que no saben o no quieren hacer-, la mayor parte de los burócratas municipales no tienen nada más “que rascarse las/los ?-”&”. Su aparente falta de voluntad, experiencia, conocimiento y etc. no les permite favorecer a la administración municipal, eso sí, el día de pago ahí están puntualmente cobrando, la mayoría de ellos se mantienen en el puesto como llegaron, es decir: generalmente por compromisos políticos.

Teoloyucan no merece tener servidores públicos irresponsables, quienes continúan “mamando” del erario público por la aparente falta de estrategias o voluntad del señor de la “Silla Grande” para deshacerse de ellos, motivos y argumentos para no querer hacerlo, debe de tener muchos, al final, eso no lo exime de la responsabilidad en el compromiso a cumplir para bien de las mayorías y de la imagen del propio PRI que de continuar gobernando así, seguramente no repetirá en la siguiente administración. Aguas... Sr. Raúl Domínguez Rex!!