Distrito Federal— El sacerdote Gregorio López Jerónimo, vicario de Apatzingán, Michoacán, condenó el homicidio de su homónimo, el padre Gregorio López Gorostieta, al tiempo que atribuyó el homicidio a los dichos del párroco durante su última misa.

“Mi tocayo acusó a estos criminales en su homilía el pasado domingo 21 sobre los 43 estudiantes de Ayotzinapa, no obstante ante este abominable caso la iglesia católica seguirá alzando la voz y denunciando toda arbitrariedad y atropello de los derechos fundamentales”, recordó López Jerónimo en un carta enviada a la agencia Quadratín.

Afirmó que el crimen organizado no ha podido corromper a la iglesia católica, por lo mismo realiza un posicionamiento de repudio ante tales hechos, por lo que aplazó al gobierno federal a dar con los responsables del homicidio del sacerdote de Ciudad Altamirano.López Jerónimo ha alzado la voz contra el ex alcalde de Apatzingán, Uriel Chávez, y gran parte de los líderes de Los Templarios, además de impulsar las autodefensas en la zona de Tierra Caliente de Michoacán.

En entrevista para Grupo Imagen, el "Padre Goyo" reprochó que la Conferencia del Episcopado Mexicano no ha alzado la voz contra los crímenes contra los sacerdotes, "han faltado más acciones. No hemos hecho nada. No ha hecho declaraciones contundentes".

"Queremos que (este crimen) no se quede impune, que la gente no se quede solo rezando", expresó.

Sobre la situación en Michoacán, dijo que falló la estrategia del comisionado Alfredo Castillo para brindar seguridad, ya que dejó acercar a cualquiera, tal es el caso de Luis Antonio Torres, "El Americano", quien viene de cárteles de la droga.

Dijo que a pesar de que los Templarios estén con baja actividad en Michoacán, él sigue corriendo riesgos, porque los criminales no lo han perdonado.

 

 

*Agencias