El gobierno de Nueva Zelanda inició una investigación independiente sobre la actuación de la mayor empresa del país, Fonterra, que debió retirar productos lácteos del mercado asiático por riesgo de botulismo.

Fonterra, la mayor empresa láctea del mundo, dijo que vendió a ocho clientes concentrado de la proteína del suero de leche sospechoso de estar contaminado debido a una cañería sucia en una de sus plantas.

La empresa debió disculparse formalmente con sus clientes en China.

El escándalo llevó a varias empresas compradoras de productos de Fonterra, incluyendo Danone, a retirar productos del mercado en Asia.

Fonterra informó este mes que algunos de sus productos lácteos despachados a China podrían estar contaminados con la bacteria que causa el botulismo, una enfermedad potencialmente fatal.