fotos: Ivan Maldonado.-

Redaccion Odilón Larios Nava.-

Cuatro sujetos encapuchados, que portaban armas de fuego ingresaron a las 00:00 horas de este miércoles  al bar denominado “La pulquería” ubicado en la Vía Corta a Santa Ana a la altura de la Central de Abasto, donde hicieron varios disparos, presuntamente, para llevarse el efectivo que había en el lugar. Una de las balas alcanzó al nieto del propietario; tras cometer el robo los sujetos salieron, y se enfrentaron con policías estatales que llegaron al escuchar los disparos, se presume uno de los delincuentes resultó lesionado.

El joven de nombre Jeffrey Ángel García, de 17 años de edad, ayudaba a su abuelo – el propietario de La Pulquería – en el negocio, yendo a recogerlo en algunas ocasiones y haciendo lo que su mayor le mandaba, es por esa razón que este infausto día se encontraba en el bar, que también es un prostíbulo en donde se prostituyen de forma ilegal y clandestina algunas mujeres.

Cerca de las 00:00 horas cuatro sujetos armados, a los cuales no les pudieron ver los rostros, ingresaron al local, exigieron el dinero, y luego golpearon a varios de los que se encontraban presentes en el lugar, entre ellos al velador de la tercera edad con que cuenta este establecimiento.

Hasta el momento se desconoce por qué los sujetos comenzaron a hacer disparos al interior del bar, pero hicieron varias detonaciones; una de las balas impactó en el pecho de Jeffrey, dejándolo gravemente lesionado. Los disparos fueron escuchados por elementos de la policía estatal, que custodiaban un inmueble muy cerca del lugar.

Los uniformados acudieron  y justo cuando iban llegando, uno de los delincuentes los visualizó, y dio aviso de retirada a sus cómplices, cuando los maleantes salieron, abrieron fuego contra los uniformados y éstos repelieron la agresión, se cree que por lo menos lograron lesionar a uno de los delincuentes.

Los sujetos lograron llegar hasta un taxi de la centra Omega, que al parecer los estaba esperando con el motor encendido, y de esta manera huyeron con dirección a San Pablo del Monte. Los policías se vieron imposibilitados de seguir a los rateros, porque sus vehículos se encontraban del lado contrario, separados de los maleantes por una zanja.

En ese momento pidieron refuerzos, llegando al lugar elementos de la Policía Municipal del Sector Cuatro y del Grupo Táctico, que colaboraron en las labores de búsqueda del taxi, sin que lograran ubicarlo. También llamaron a una ambulancia para que atendiera al lesionado.

Jeffrey fue retirado del interior del antro y luego, sus familiares lo subieron a una camioneta Dodge, color gris con rojo, con intención de llevarlo directamente a un nosocomio, pero decidieron esperar a los paramédicos. Llegaron paramédicos de SUMA y trasladaron al joven al Hospital General del Norte en donde momentos después perdió la vida.

Las diligencias del levantamiento del cuerpo fueron llevadas a cabo por el agente del Ministerio Público Especializado en Homicidios, quien además llegó al lugar de los hechos para realizar los peritajes y la recolección de indicios con peritos en balística y personal de la policía ministerial. Por este homicidio se inició la averiguación previa 78/2012.

PIDE EL PROGENITOR QUE SE AGOTEN LAS LÍNEAS DE INVESTIGACIÓN

Por su parte el padre del menor, señaló que aunque todo parece que fue un asalto a mano armada, no se descarte ninguna otra posibilidad, como algún posible ajuste de cuentas con el propietario del bar.

Esta duda resalta sobretodo por la actitud tomada por el abuelo del occiso, quien no rindió su declaración ministerial en la madrugada, y quien no permitió que una de sus empleadas testigos de los hechos hiciera lo propio.

Según la mujer testigo de los hechos, trabajadora de La Pulquería, Jeffrey desde ese día muy temprano, tenía un golpe en la cara, lesión que le inflamó el ojo, por lo que portaba unas gafas oscuras. Es por ello que el padre del joven no descarta que antes haya ocurrido alguna situación relacionada con el bar de mala muerte de su suegro, y esto haya desencadenado que alguien acudiera a cobrar venganza.

Sin embargo estas no dejan de ser conjeturas de un padre que perdió a su hijo y que exige que se haga justicia.