Glob@l México.- Teoloyucan, Edomex.- A los teoloyuquenses se les acaba la paciencia. A doce meses de su mandato, en las marchas por la paz de diciembre de 2013, Juan Salvador Montoya Moya, les pidió a los más de mil manifestantes inconformes que aguantaran un poco más, que las cosas cambiarían para bien.

A cuatro meses no ha cumplido lo pactado en los pliegos petitorios entregados por los inconformes en el mes de diciembre, con los que al firmar se abría comprometido a restablecer la seguridad en el municipio, acordando una serie de medidas para mejorar la seguridad en el poblado.

Contrario a una respuesta favorable, el munícipe ha desconocido los documentos donde se comprometió a implementar las medidas solicitadas por los pobladores inconformes en reclamos justos.

Las promesas del edil emanado del Partido Revolucionario Institucional, no solo siguen sin cumplirse, sino que las condiciones de inseguridad son hoy peor que hace cuatro meses.

A los teoloyuquenses, decíamos se les acabó la paciencia y ahora el reclamo central es que Montoya abandone el cargo. Lo anterior fue manifestado por uno de los integrantes de una agrupación conformada posterior a las marchas por la seguridad, que pidió no se mencionara su nombre por temor a represalias, quien manifestó a representantes de este medio “Que renuncie el edil”, es lo que estaremos pidiendo los organizadores de las marchas que tendrán verificativo en los próximos días.

“le hemos dicho a Juan Salvador Montoya Moya que su estrategia de seguridad no funciona, y lo que hemos recibido de parte de él han sido descalificaciones. La verdad es que la gente quiere que se vaya, no es un asunto personal, no es un asunto de grupo”, es un asunto que se debe atender de manera inmediata, toda vez que las tasas delincuenciales que se registran en todo el territorio municipal son peligrosamente  alarmantes, acotó.

“Haciendo a un lado las banderas políticas que aquí no tienen nada que ver, es lo que nos ha movido a dar una voz a este movimiento que está organizando por representantes de la sociedad civil, las marchas desde nuestro punto de vista son una expresión ciudadana del hartazgo, de la preocupación por la seguridad de cada uno de los habitantes del municipio”, dijo.

Montoya Moya insiste en que todo está bien. Ante nosotros ha defendido su estrategia de seguridad y ha insistido, como lo ha hecho desde hace meses, que sí hay avances y que, como prometió hace cuatro meses, los resultados están llegando, por lo que Teoloyucan es hoy más seguro, algo que no es cierto, aseguró.

La mayoría de los habitantes del municipio que fueron entrevistados por integrantes de este medio, aseguraron que el edil cometió el error de comprometerse mediante la firma de los pliegos petitorios, incluso darse a la tarea de manera inmediata para poner orden en el municipio, algo que no ha cumplido.

Con mensajes triunfalistas y con una posición intransitable en el tema, el mandatario priista y su equipo han tratado de minimizar el drama que viven actualmente las familias de Teoloyucan, acosadas por diversos delitos de alto impacto, predominantemente el homicidio, el secuestro, la extorsión y los asaltos.

El actual munícipe puso la vara muy alta cuando llegó al poder y generó una expectativa que no puede cumplir. Por lo menos no solo y no en los casi 16 meses de su gobierno. Ahora, la demanda ciudadana es severa y llega justo al vencerse el plazo que el hartazgo de la ciudadanía a macado y que no permite que la situación continúe.

En la visita al municipio, pudimos percibir que el actual gobierno local está visiblemente deteriorado, debilitado por las críticas y, particularmente, por los malos resultados de su gestión.