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Dos mujeres, una de ellas embarazada, resultaron lesionadas en aparatoso choque entre moderna camioneta y un taxi, la noche de ayer, en la Glorieta Insurgentes, de Pachuca.

La colisión se debió a lo que agentes de Tránsito y Vialidad identifican como un semaforazo, pues uno de los conductores no respetó la luz roja.

Gabriela Fernández Hernández, de 21 años, con un embarazo de mes y medio, pasajera del vehículo de alquiler Tsuru Nissan, matrícula 6631-FUD, se sintió mal de salud tras el impacto.

También lastimada resultó Estela Bobadilla Quiroga, de 66 años, quien viajaba en la Toyota Sienna, placas de circulación PYD-9009.

Alrededor de las 20:15 horas, según testigos, los vehículos citados transitaban en las inmediaciones de la rotonda.

Raúl de Lucio Ramírez, de 26 años, conducía el vehículo de alquiler.

La unidad particular era tripulada por Humberto Jaime Arzate, de 52 años.

Peritos de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito de Pachuca se encargaron de realizar el respectivo parte de accidente, una vez que orillaron los vehículos, ya sobre la avenida Juárez.

Los uniformados comentaron que los dos manejadores afirmaron que tenían la luz verde del semáforo, por eso continuaron su marcha.

De esta manera la Toyota se estrelló en el costado izquierdo del taxi, a la altura de la portezuela del chofer.

Tras el choque, no faltó quien, a través de su celular, hablara al número de emergencia 066 para pedir apoyo de cuerpos de auxilio y rescate.

La joven mujer, embarazada, permaneció por varios minutos en el asiento posterior del taxi donde iba, quejándose de dolores.

Hasta ahí, poco después, llegó su esposo, alarmado, por lo acontecido.

Del mismo modo hicieron acto de presencia representantes de aseguradoras de ambas unidades, con el propósito de llegar a un convenio respecto al pago de gastos médicos y daños materiales.

A petición de familiares de la embarazada, pidieron la presencia de una ambulancia para que la trasladaran a una clínica particular y fuera atendida médicamente..

En cuanto a la sexagenaria, se conoció, no fue necesario hospitalizarla y fue más el susto que sufrió, al igual que otros ocupantes de la camioneta.

Los agentes de Tránsito y Seguridad Pública comentaron que, en caso de que no hubiera un arreglo extra judicial, las unidades serían remitidas al corralón.

Posteriormente el caso quedaría a disposición de la Procuraduría de Justicia con el fin de deslindar responsabilidades.

Fuente: El Sol De Hidalgo